Wandering Grace es el Rosé para personas exigentes que disfrutan de los momentos únicos de la vida, que comparten un modo de vida diferente. Es para inconformistas que disfrutan del arte, los viajes, la lectura, y la naturaleza, pero sobretodo para aquellos que entienden que la compañía de aquellas personas especiales, que proporcionan recuerdos inolvidables, es imprecindible en sus vidas. Wandering Grace está hecho para formar parte de esos momentos únicos.
Wandering Grace es un vino universal que está teniendo una buena acogida internacional. Ya se bebe en ciudades cosmopolitas como Munich, Amsterdam, Helsinki y Zurich. Muy pronto también se podrá disfrutar de Wandering Grace en fiestas privadas y terrazas por todo el mundo.
Wandering Grace es el resultado del empeño y determinación de dos personalidades aventureras que van a reinventar el mercado del vino Rosé de gran calidad: Lauren Rosillo, enólogo innovador y de reconocido prestigio internacional, es una de las grandes figuras del panorama actual como reconoce la prestigiosa revista Decanter; Gregorio Bustos, emprendedor, escritor y bodeguero de familia ligada al mundo del vino desde hace generaciones.
Wandering Grace es un vino ecológico que da respuesta a la necesidad de respetar el medioambiente, sumandose así a la imparable tendencia internacional que prioriza el respeto a la naturaleza.
La esencia de Wandering Grace, como su nombre indica, está inspirada en las Tres Gracias de la mitología griega: la Belleza, la Elegancia y la Naturaleza. La Belleza, representada por el dibujo a plumilla de la Gracia en la etiqueta y el diseño elegido para la botella; la Elegancia, por la delicadeza de las características de este vino, sobre todo su color espectacular en copa; y la Naturaleza, por ser el fruto de una selección de garnachas orgánicas bendecidas por más de 2.500 horas de sol al año que confieren a este vino un color, aroma y sabor únicos.
Sus tonos de un rosa pálido, nos harán soñar con los atardeceres majestuosos de las tierras castellanas, tan añoradas en territorios más fríos. De un color limpio y brillante, destacan sus toques grises y asalmonados.
La nariz se inunda de cerezas, fresas y ligeras notas balsámicas que lo hacen especialmente refrescante. Suaves matices de anís y endrinas le dan un toque mineral y complejo.
En boca es aromático y voluminoso. Sentimos como el vino se desliza, mientras nos inunda con la fruta. El final es largo y nos recuerda las sensaciones vividas mientras teníamos del vino en la boca.
Servido a su temperatura idónea, unos 12ºC, nos resultará alegre y refrescante.
Este vino no sólo inundará nuestro paladar sino que vestirá nuestra mesa con un toque de color, elegancia y originalidad.
Marida muy bien con pastas, arroces, marisco y pescado. También es ideal para carnes blancas, pizza y tapas.
Wandering Grace conquista a aquellas almas sensibles que entienden de la vida: que disfrutan de los placeres de la buena compañia, del sol, del verano, de los amigos, de la aventura.
Visitar web de Wandering Grace Rosé
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